Ifis y Anaxárete

Anaxárete se convierte en piedra, A.Tempesta, 1619

     Ifis, un joven de origen humilde, se había enamorado perdidamente de Anaxárete, una doncella cuya noble familia descendía del héroe legendario Teucro.

     

       Ifis buscó el modo de acercarse a ella y declararle su amor, pero siempre recibía el rechazo por respuesta. Día tras día acudía a colgar coronas de flores en su puerta, le escribía mensajes de amor en tablillas y se sentaba a esperar en el umbral de su casa. Sin embargo la joven no solo no correspondía a su amor, sino que además disfrutaba lanzándole crueles burlas.

     

      Llegó el día en que Ifis, cansado de tanto deprecio, decidió poner fin a su vida. Se colocó frente a la puerta de Anaxárete y elevó su mirada al cielo, implorando a los dioses un castigo para la soberbia joven. Después, con los ojos inundados en lágrimas, se ahorcó con una de las coronas de flores que allí había colocado como muestra de su amor.

A la vista del funeral Anaxarete se convierte en piedra, J.U. Krauss, 1690

       El día del entierro, el cortejo fúnebre pasó cerca de la casa de Anaxárete. La joven, al oír el llanto de la madre de Ifis, se asomó a la ventana para ver como el cuerpo era conducido a la pira funeraria. De repente, la sangre dejó de fluir por sus venas. Ella trató de volver su rostro pero no pudo moverse. Su piel se puso pálida y dura y poco a poco se convirtió en una figura de mármol, la dura piedra que hasta ese momento había sido su corazón.


Bibliografía:
-OVIDIO, Metamorfosis, Madrid, Alianza Editorial, 2001.

Descarga el artículo en pdf en este enlace:

Ifis y Anaxárete.pdf